28.10.16

Sin 1º de mayo no hay 31 de octubre

Cada país tiene su cultura, y ciertos países tienen la intención de ser originales a la hora de elegir una fecha especial para decretar.
Especialmente, los argentinos estamos tan delicados con el tema de las "fechas patrias yanquis", "insignificantes días comerciales" o "conmemoraciones colonizadoras", que de inmediato rechazamos una que pareciera absurda y que no obstante es una inspiración pagana de una tradición católica, como es la llamada "Halloween".
Sin embargo, aceptamos a corazón abierto otras festividades derivadas de lo que solemos juzgar, como el 1º de mayo. Esto se trata de un caso de distinta vara.

Para que entendamos un poco más de qué se trata, vamos a estudiar un poco de Historia, manga de vagos:

En noviembre de 1884 se celebró en Chicago el i.e. Congreso de la Federación Americana del Trabajo, en el que se propuso que a partir del 1º de mayo de 1886 se obligaría a los patrones a respetar una jornada de 8 horas y, si no, se iría a la huelga.
Llegada la fecha, las organizaciones laborales y sindicales de Estados Unidos se movilizaron y paralizaron el país con más de cinco mil huelgas. 
El episodio más famoso de esta lucha fue el funesto incidente del 4 de mayo de 1886 en la Plaza Haymarket de Chicago, durante un acto de repudio a una brutal represión ocurrida el día anterior contra unos huelguistas, durante la cual habían sido asesinados 8 obreros. Cerca del final del acto ingresó a la plaza un escuadrón policial. Una bomba fue arrojada y al explotar mató a un policía e hirió a otros. De inmediato la respuesta policial dejo un tendal de unos 40 manifestantes muertos y decenas de heridos. No satisfecho con eso el gobierno de Illinois acusó a varios dirigentes obreros por esos hechos. Aunque nunca se probó quién fue el responsable de ese atentado, en 1887, ocho líderes anarquistas fueron acusados, juzgados sumariamente y cinco condenados a muerte. Fueron ahorcados (menos uno que apareció sospechosamente muerto en su celda) a pesar del reclamo y oposición mundial. 
Dos años después, en julio de 1889, la Segunda Internacional reunida en París resolvió que “Se organizará una gran manifestación en fecha fija, de tal manera que simultáneamente en todos los países y en todas las ciudades en el mismo día convenido, los trabajadores pedirán a las autoridades oficiales la reducción, mediante una ley, de la jornada de trabajo a 8 horas... En vista que una manifestación análoga ha sido aprobada para el 1º de Mayo de 1890 por la Federación Americana del Trabajo, en su Congreso celebrado en Saint Louis... se adopta esa fecha para la manifestación internacional”.

Fuente: argentina.indymedia.org


Halloween (contracción de All Hallows' Eve, 'Víspera de Todos los Santos'), también conocido como Noche de Brujas o Día de Brujas, es una fiesta moderna resultado del sincretismo originado por la cristianización de las fiestas del fin de verano de origen celta.
Sus raíces están vinculadas con la conmemoración celta del Samhainy la festividad cristiana del Día de Todos los Santos, celebrada por los católicos el 1 de noviembre. Se trata en gran parte de un festejo secular, aunque algunos consideran que posee un trasfondo religioso. Los inmigrantes irlandeses transmitieron versiones de la tradición a América del Norte durante la Gran hambruna irlandesa.
La mayor parte de la sociedad española y latinoaméricana consideran que Halloween es una fiesta estadounidense que ha "invadido" España y América Latina por la expansión de la cultura de Estados Unidos (medios de comunicación, Hollywood, series...). Lo cierto es que las tradiciones que se celebran en Halloween se celebraban en España antes incluso de que existiera Estados Unidos como nación. Por lo tanto se puede afirmar que Halloween también puede ser considerada como una tradición ibérica (no con este nombre, sino como parte del Samhain). En España y América Latina actualmente se ve Halloween como algo similar al Carnaval pero con disfraces y ambiente de temática de terror.

Fuente: es.wikipedia.org


Si nos ponemos a pensar en todas las celebraciones que debiéramos dejar de conmemorar "por su origen yanqui", también tendríamos que suprimir o mover en nuestros calendarios festivos fechas como el 8 de marzo o el Día del Padre. Y paro de contar, porque de los días conmemorativos internacionales, la mitad son yanquis.

Sin 1º de mayo, 8 de marzo o 3º domingo de junio, no hay 31 de octubre, 14 de febrero o 28 de diciembre.
El patriotismo no tiene porqué basarse en un calendario gregoriano, romano, maya, inca, chino o judío. Argentina es un crisol de razas, desde los Pueblos Originarios que nunca necesitaron un almanaque para celebrar feriados, hasta los inmigrantes europeos que completaron nuestra civilización.
Entonces, por qué somos tan quisquillosos con unas cosas y damos la vida por otras ignorando sus respectivos orígenes?
Nuestro país es el único que festeja el Día de la Madre el tercer domingo de octubre, la Semana de la Dulzura, el Día de la Lealtad, el del Estudiante, entre otras fechas comerciales, políticas y dentro de todo sociales, en sus respectivas fechas.
Y hasta tenemos nuestro propio Día del Amigo (que no se celebra el mismo día que en Estados Unidos, pese a que dicen que tiene su origen allí, argumento errado).
Los ateos no creen que Jesús haya nacido, pero sí creen en el Papá Noel de las propagandas que es una versión comercial de San Nicolás. Fíjense cómo la Iglesia Católica y los ateos hallan un punto en común.

Por eso, y debido a que no sólo hay gente de mierda en mi país por la cual existen días conmemorativos, sino también hay razones válidas en cualquier parte del mundo para celebrar una fecha especial, les deseo hoy un feliz 29 de octubre, Día Mundial de la Lucha contra la Psoriasis.

No comments:

Post a Comment